El Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, quinta edición (DSM-V) señala las siguientes características como propias del Trastorno del Espectro Autista:
- Deficiencias persistentes en la comunicación social y en la interacción social en diversos contextos.
- Patrones restrictivos y repetitivos de comportamiento, intereses o actividades.
El DSM-5 ha sustituido cuatro subtipos (Trastorno Autista, Síndrome de Asperger, Trastorno Desintegrativo Infantil y TGD no especificado) por la categoría general “Trastornos del Espectro Autista” (TEA). El síndrome de Rett ya no forma parte de este sistema de clasificación. En lugar de hacer distinción entre estos subtipos, la definición diagnóstica del DSM-5 especifica tres niveles de gravedad en los síntomas, así como el nivel de apoyo necesario:
Nivel 1. Necesita ayuda: dificultad para iniciar interacciones sociales, así como respuestas atípicas a las mismas y comportamiento inflexible que interfiere en uno o más contextos.
Nivel 2. Necesita ayuda notable: manifiestan deficiencias notables en las actitudes de comunicación social verbal y no verbal, emiten frases sencillas cuya interacción se limita a intereses especiales muy concretos, así como ansiedad para hacer frente a los cambios y situaciones.
Nivel 3. Necesita ayuda muy notable: personas con pocas palabras inteligibles, así como extrema dificultad y ansiedad excesiva para hacer frente a los cambios y situaciones.
Fuentes de información:
AMERICAN PSYCHIATRIC ASSOCIATION (APA). (2002). Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales DSM-IV-TR. Barcelona: Masson.
AMERICAN PSYCHIATRIC ASSOCIATION (APA). (2014). Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales DSM-V. Barcelona: Masson.